Clasificó el Once Caldas a Octavos de Final de la Copa Águila, en un torneo que entrega un premio interesante en cuanto a lo deportivo pues un cupo a Libertadores siempre será llamativo. Sin embargo,  el partido con el que se cerró la primera fase fue menos alentador de lo que se esperaba. Presentamos algunas conclusiones:

1. Daniel Rojano se ha convertido en un jugador de intermitencias, juega un partido bien y uno mal lo que no le permite afianzarse en el grupo y hace que otros nombres estén por encima de él a la hora de armar una nómina. Tuvo repetidas fallas al igual que Marcos Acosta en el medio y de no ser por la juventud del visitante, otra situación hubiese podido ocurrir en el resultado.

2. El nivel de Sergio Romero sigue siendo decepcionante, otro penalty desperdiciado y ocasiones increíblemente dilapidadas frente al arco han acabado por desgastar la relación de la hinchada con el jugador, quien sigue sin responder a la confianza de los técnicos.

3. Se volvió a marcar un gol olímpico en el Palogrande después de 14 años, esta vez fue Mateo Cardona el encargado de lograr esta bonita anotación. El antioqueño sigue careciendo de fútbol, le falta ser más influyente y más rápido en la toma de decisiones.

4. El nivel del joven Miguel Nazarit continúa en ascenso y se está asentando en la zaga central dando ilusión para el futuro defensivo del Once Caldas. No obstante, el colectivo ‘albo’ erró en defensa y fue contragolpeado fácilmente en varias ocasiones.

5. El colombo-venezolano, Dany Cure logró quitarse la sal de encima como el mismo lo manifestó en su celebración del gol y concretó un buen partido en los 45 minutos que estuvo en cancha, en lo que ha sido uno de sus juegos más destacados del semestre. Sorprendió que Cure no quiso dar declaraciones al final del compromiso y evadió a los medios de comunicación en zona mixta.