Foto: Santiago Álvarez

Pasaron 8 meses y 15 días desde aquella dolorosa lesión de David Fernando Lemos en la final de la Copa Águila 2018 ante Nacional en Medellín. Fue ruptura de ligamento cruzado con compromiso de meniscos; el mundo parecía terminar ahí para el jugador, pues no solo se perdió el título sino que su rodilla lo hizo sentir uno de los momentos más amargos de su corta carrera.

El tiempo pasó, la parte médica fue superada y ese momento triste y frustrante, hoy se convierte en ilusión y expectativa. Ya ha pasado el tiempo suficiente, mientras el hombre de Orito, Putumayo, cuenta las horas para su nuevo debut.

“Cada día me lleno más de confianza, sigo mejorando y aprendiendo con el grupo; estoy esperando la oportunidad cuando el profesor lo requiera necesario. Pensé que de pronto me iba a costar un poco más, pero gracias a Dios me he venido sintiendo muy bien. Faltan algunas cositas, sobre todo en lo físico, aún cuesta mucho”, dijo Lemos.

En las prácticas ha empezado a destacar con sus habituales movimientos en ataque: desmarques, fuerte en el hombre a hombre, sólido con el balón y encarador. “El profesor dice que me ve muy bien, que está reuniendo conceptos y va a ver el momento oportuno. Estoy motivado, me siento muy bien, se lo dije al profe y día a día me voy fortaleciendo más”, aseguró.

El delantero de 23 años confía en debutar pronto, pero dice que toma las cosas “con calma” para no apresurarse, a pesar que se preparó desde el primer partido para jugar.

¿Creen que Lemos volverá a la cancha pronto? #LaVozDelHincha