El miércoles 21 de septiembre finalizando el partido entre el Cortuluá y Cali se vio un hecho para tener en cuenta y es que varios hinchas del Deportivo Cali ingresaron al terreno de juego del estadio Doce de Octubre.

Los aficionados corrieron para buscar los referentes del equipo y el ya extécnico. Mayer Candelo al igual que Teofilo Gutierrez fueron los principales blancos de los aficionados en esa jornada.

Cali fue sancionado con 5 fechas jugando a puerta cerrada por el mal comportamiento de su hinchada, esto  basados en un antecedente del primer semestre donde la hinchada de América tuvo un mal comportamiento en Pasto y el equipo rojo fue sancionado con una fecha obligado a jugar sin público en el Pascual.

Después de confirmado dicho castigo, desde el cuadro azucarero se tomó la opción de apelar la sanción y pedir los puntos del compromiso. El mismo club argumenta que la seguridad correspondía al conjunto local.

Por ahora no se sabe en qué estado está la apelación, pero habrá que esperar a que la Dimayor saque un comunicado y ver si cambió la decisión ante los hechos, sin embargo, los hechos fueron cometidos por la hinchada azucarera por lo que darle los puntos sería premiar la violencia.