Con la narración del penal atajado de Juan Carlos Henao a Cángele, comienza el gran podcast de Antena 2, en entrevista con Edwin García, ex lateral del Once Caldas, y quien levantó el título de campeón de Copa Libertadores. También, estuvo a centímetros de ser quien le diera la gloria mundial al Blanco Blanco.

“El objetivo era pasar segunda ronda. El Once nunca había llegado a esta instancia. Se logró, y los resultados se empezaron a dar. A medida que pasamos de fase se creo ese gran sueño de llegar a la final.

Velez era el rival a vencer. La clave fue que de locales nos hicimos fuertes, y de visita el profe armaba dos líneas de cuatro muy difíciles de pasar. Había partidos que terminábamos 5-4-1, de locales sí soltábamos más a Soto y a Viáfara y Alcázar en punta.

BARCELONA

Comenzamos con línea de 3: Miguel Rojas, Cataño, Ortegón, Vanegas y yo por izquierda. Volantes Casas y Viáfara, eso en defensa. Luego se lesiona Ortegón y comenzamos a usar la línea de tres con Casas. Contra Maracaibo también. Soto no era titular con esa línea de tres. Pero el Profe saca un defensa y lo pone de titular.

Barcelona fue un partido muy difícil allá. Acá empezamos perdiendo pero logramos empatar y en penales ganarlo. De 14 partidos jugué 13 (solo falté contra Fenix en Uruguay).

SANTOS

Contra Santos era dificilísimo. Robinho, Diego, Elano, Leo, un equipo muy duro. Llegamos allá, nos plantamos. Empezaron ganando pero les empatamos. Ellos se desesperan y ahí mismo el profe arma las dos líneas de cuatro.

En Palogrande se soltaron más porque les dimos más espacio. Diego fue la figura. Ese día Valentierra fue el héroe con ese golazo.

SAO PAULO

Ya eran cosas mayores. Nos pasaron coSas que a un grande no le suceden. Solicitamos la cancha de reconocimiento a Morumbí y no nos dejaron. Nos mandaron a una cancha a casi dos horas. Entrenamos 20 minutos y se fue la luz.

En Morumbí llegamos y eran miles de hinchas. Normalmente un partido de esos queda 5-1, pero teníamos la ilusión. Llegamos una hora y media antes al estadio. El estadio estaba en silencio y cuando salimos todos empezaron a cantar. Eso a uno como jugador lo motiva, jugar en un estadio grande. En el camerino empezamos a cantar y a alentar, que les ibamos a arruinar la fiesta, y así fue.

Salimos a dar todo. Quedamos 0-0. En el minuto 20 los hinchas comenzaron a silbar y a exigir porque fallaban muchas. Acá comenzamos ganando, nos empata pero luego Agudelo marca ese gol que nos da el triunfo. En camerino, Cataño que abrazaba a todo el mundo, estaba perplejo.

Montoya decía que de visitante máximo perder 1-0, que con la altura a los brasileños les iba a dar muy duro.

LA FINAL CONTRA BOCA JUNIORS

Clasificamos antes que Boca. Tuvimos la oportunidad de ver esa semifinal entre Boca y River. Yo quería jugar en la Bombonera. En ese momento era el actual campeón.

Fue una locura allá. No nos prestaron la Bombonera para el reconocimiento. Tuvimos que ir a entrenar a un estadio muy feo. Salimos al calentamiento y todos silbaban. Nadie creía. Ellos tuvieron muchas opciones de gol pero seguíamos con esa bendición.

Cuando salió Boca fue un espectáculo ver ese recibimiento. Los argentinos viven el fútbol muy distinto, son muy apasionados.

CAMPEÓN

A las tres de la tarde Palogrande ya estaba lleno. Lo veíamos por Fox que comenzaron la transmisión desde muy temprano.

Tener la posibilidad de jugar y poder ser campeón es increíble. Cuando pateó Valentierra y ataja el Pato nos dio duro. Pero Henao estuvo gigante. Empezaron a darse las cosas. Boca los falló todos, teníamos la suerte de campeón.

Cuando Henao ataja el último agradecí a Dios. Ahí si corrí a abrazar a Henao.

Creo que fui importante. Fui titular de principio a fin. Cada jugador en su posición se hizo fuerte y aportó para lograr esa Copa Libertadores.

Cada que veo programas de Libertadores se me eriza la piel”.