Por: Cristian Hernández

El volante ofensivo del Once Caldas, Javier Reina, le ha demostrado al técnico en estos días de pretemporada por qué la decisión de insistir en su llegada al plantel. La técnica es envidiable, tiene pelota quieta y además se compenetró muy rápido con el grupo tanto en la parte profesional como personal.

Le gusta ser ‘10’, siente la capacidad suficiente para cumplir ese rol y cree que se pueden hacer grandes cosas en el Once. Rechazó ofertas ante el pedido de Hubert Bodhert y está ansioso para que inicie la temporada. 

¿Cuáles son sus sensaciones iniciales con este Once Caldas?

Estoy feliz desde el primer día; cuando llegué el grupo me recibió muy bien, hay una linda familia y estoy muy contento de estar perteneciendo a ella. Me siento motivado y la adaptación ha sido rápida.

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¿Qué tiene Javier Reina para aportarle al Once?

Tengo buen pie, puedo demostrar y generar buen fútbol. Tengo la capacidad de dejar a mis delanteros mano a mano y poder aportarle a mi equipo la experiencia adquirida en el exterior. Vengo a sumar, a ser un integrante más de esta familia; venimos trabajando bien, preparándonos para ello.  

¿Usted es un ‘10’ clásico o es un hombre de dos áreas?

Mi posición es ser ‘10’, pero con el transcurrir de los años y la experiencia en varios países, hemos tenido que aprender a hacer otras cosas, a adaptarnos al fútbol moderno y obviamente podemos cumplir diferentes funciones, la idea es aportar.

¿Qué pensó cuando le dijeron que el Once Caldas era la posibilidad?

Me sentí feliz. Reitero, llegar al Once es una gran oportunidad, es un equipo inmenso por su historia. El año pasado con el trabajo del ‘profe’ Bodhert, se volvió a posicionar el Once donde siempre tiene que estar por lo que ha hecho y conseguido, entonces para uno como jugador siempre es motivante y de una alegría inmensa pertenecer a este gran proyecto.

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¿Rechazó ofertas para llegar a Manizales?

Sí, claro. Tenía 3 opciones más, con la posibilidad también de renovar en Brasil. En enero del año pasado, tenía la oportunidad de venir al Once, lastimosamente por cosas externas no se dio, pero era un anhelo trabajar con el ‘Profe’ Bodhert y ahora las cosas se dieron gracias a Dios.

¿Cómo siente que le fue en el Ceará de Brasil, su último club?

Feliz por otro pasaje más en el fútbol brasilero; ya acumulo 4 años y medio en ese país. Contento porque fui campeón. Lastimosamente el último torneo no fue el mejor, el técnico que me dio la confianza termina saliendo del equipo y bueno, entran otras cosas, pero satisfecho, en general estuvo bien.   

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