Por: Juan Manuel García

Ya falta menos de un día para que se escuche el pitazo inicial de la final de la Europa League 2018/2019, que se disputará en Bakú, capital de Azerbaiyán, una anterior república soviética.

Por primera vez desde que la competición se llama Europa League y no Copa UEFA, dos equipos de la misma ciudad disputarán el título; dos equipos londinenses como lo son Chelsea de Maurizio Sarri y Arsenal de Unai Emery.

Ambos equipos lograron avanzar todas las fases para llegar a Bakú, tras haber llegado a la competición de manera directa. El Arsenal tuvo un cuadro más complejo. Se enfrentó antes de la final al Bate Borisov de Bielorrusia, Stade Rennes de Francia, Nápoles de Italia y Valencia de España.

Entretanto el Chelsea, que se coronó campeón en la edición de 2013, en la presente edición logró vencer al Malmo de Suecia, Dinamo de Kiev de Ucrania, Slavia Praga de República Checa y Eintracht Frankfurt de Alemania.

Ambos equipos llegan con la ilusión de agregar un título a sus vitrinas, ambos llegan a jugarse parte de su futuro. Chelsea y en especial Maurizio Sarri ven la final como un punto que puede definir si el entrenador italiano sigue con el conjunto ‘blue’, a pesar de los recientes rumores que lo vinculan a la Juventus.

Arsenal por su parte necesita ganar la Europa League, para así poder volver a la Champions League tras 3 años de ausencia y de esta manera también Unai Emery se consagraría como el entrenador más laureado de la competición, al cosechar lo que sería su cuarto título, tras los 3 conseguidos con el Sevilla.

En menos de 24 horas rodará el balón en Bakú, ya se sabe que el título se celebrará en Londres, lo que aún queda por definir es si será en el oeste con el Chelsea o en el norte con el Arsenal.