Once Caldas subcampeón de la Copa Águila, el Blanco perdió con las botas puestas.

Impotente, dolida pero orgullosa terminó la hinchada del Once Caldas en el Atanasio Girardot. Atlético Nacional venció por 2 goles a 1 al conjunto blanco, y se quedó con el título de Copa Águila, que estuvo cerca para el Blanco. El profe Hubert Bodhert usó la misma nómina que enfrentó al conjunto paisa en la ida, salvo la entrada de César Amaya por Johan Carbonero. Nacional, con Bocanegra en lugar del expulsado Helibelton, fue el único cambio del ‘Arriero’. El partido comenzó con opciones para ambos equipos, alentados cada uno por sus hinchadas que coparon el estadio. Los más de 3000 hinchas del conjunto manizaleño alentaban a los jugadores, que tuvieron varias opciones en la primera mitad como la de Amaya y Nieto, quienes estuvieron a punto de abrir el marcador. Lemos tendría que dejar la cancha por una dura entrada de Vargas, y en su lugar entraría Carbonero. Cuadrado, providencial en la primera mitad, ahogó el gritó de gol en varias ocasiones para el verdolaga, que aprovechando la velocidad de Machado y Vladimir, desequilibró por la banda derecha del Once. Así llegaría el gol. A segundos de terminar la primera mitad un taco de Rivas se la dejaría a Vladimir, quien disparó y con un desvió de Gómez marcó el primero de la noche. Comenzaba la segunda mitad. El Once Caldas buscaba de todas las formas penetrar el planteamiento defensivo de Nacional, quienes aprovechando la localía dispusieron de varias faltas controversiales pitadas por el arbitro. Bodhert priorizó la experiencia de Ray Vanegas en lugar de la picardía y el desborde de Carreazo. Al minuto 74 un rebote en el área local le quedó a Carbonero. El delantero albo con un potente zurdazo la puso lejos del alcance del portero rival y empató el marcador. La hinchada del Once se montó nuevamente como el equipo en el partido, mientras Nacional nervioso buscaba vencer a Cuadrado, de gran partido. Cuando los cerca de 40 mil espectadores esperaban por el pitazo final, y la definición desde los once pasos, Vanegas cometió falta sin balón, vista solo por el linea. En el minuto 91 (4 de adición), Bocanegra cobró y Cuadrado, que pudo haber hecho más, sacó la pelota cuando ya había traspasado la linea de gol. El Once Caldas, que mereció mucho más, quedó ad portas de conseguir la Copa, pero dejó una muy buena imagen en un estadio acostumbrado a asustar a sus rivales. Queda la Liga y la posibilidad de seguir buscando el paso a Copa Libertadores. Gracias muchachos.