Este martes, Fabio Andrés Alzate Estrada, el hincha que habría agredido al asistente arbitral el domingo anterior en Palogrande, envió un derecho de petición, donde alega que no hay pruebas reales para asegurar que él fue el agresor de Javier Zemanate y que siente afectado su imagen y buen nombre, aunque acepta que lanzó un objeto a la cancha:  “Primeramente quiero aclarar diferentes circunstancias que están afectando mi buen nombre, debido a que si bien yo arrojé un objeto al momento de culminarse el primer tiempo del partido, este objeto fue una tapa de gaseosa, además de esto la arrojé cuando el árbitro ya se encontraba fuera de la cancha de fútbol y del alcance visual de todos los asistentes al estadio y mi ubicación en el estadio no daba tampoco para hacerlo, por lo que es ilógico que me estén responsabilizando de una acción que no cometí y de la cual tampoco existen las pruebas suficientes para hacerlo”, aseguró Alzate en un comunicado de prensa.  Además, Fabio Andrés dejó ver su inconformidad ante Dimayor por hacer su nombre público con número de cédula, que se ha prestado “para amenazas y comentarios hirientes”.  Este es un caso sin precedentes en la Dimayor, pues tradicionalmente este tipo de actos no habían sido individualizados y, por el contrario, se venía optando por contundentes sanciones a las plazas donde han ocurrido situaciones similares. Por ello, esta determinación de Dimayor se ha prestado para diferentes comentarios y protestas desde otras zonas del país.  Parece que a esta historia aún le falta un capítulo y será necesario esclarecer los hechos.