Radja Nainggolan es nuevo jugador del Cagliari. Un fichaje que ha parecido extraño para muchos pero que tiene varios trasfondos.
El belga ya había jugado en el Rossoblu, cuatro temporadas y media, antes de viajar a Roma y convertirse en ídolo de la ‘Loba’. Allí cosechó no solo triunfos y logros personales, sino buenas amistades y un espacio, la isla de Cerdeña, agradable para vivir, en compañía de su esposa, Claudia.
Claudia fue diagnosticada con cáncer hace algunos meses, y comenzó una lucha, en compañía de sus dos hijas y Radja, contra esta terrible enfermedad.
El pasaje de Nainggolan en el Inter no fue el mejor. Pese a aportar en marca y salida, y anotar 8 goles en esta temporada, Antonio Conte no lo tuvo en cuenta para la próxima temporada. Varias ofertas de Europa y del fútbol chino le llegaron al mediocentro. Ofertas prometedoras en materia económica, pero rechazadas por el belga.
¿Por qué?, porque Claudia quiso volver a Cerdeña a realizar su quimioterapia. Un lugar tranquilo y que ya conoce, y donde se le trata bien. Radja, pudiendo viajar a China y ganar millones, o a la misma Florencia donde la Fiorentina le ofertaba, decidió volver al Cagliari para acompañarla.
«Estoy feliz de estar de vuelta en casa. Tomé esta decisión porque me forzaron un poco, pero al final, decidí esto y espero hacerlo bien. Tengo otras prioridades en este momento, por lo que fue fácil tomar la decisión. Ahora me desafiaré a mi mismo y trataré de demostrar que el Inter se equivocó al dejarme ir», dijo el ‘Ninja’
