Si en el Once Caldas se habló de crisis hasta hace 2 fechas, en el Junior la situación es aún peor, debido a que los barranquilleros se encuentran últimos en la tabla de posiciones y hace unos días quedaron eliminados en la fase previa de la Copa Libertadores, torneo que tenían como objetivo principal.

Los dirigidos por Alberto Gamero son el equipo que menos partidos ha disputado en la Liga; jugaron solo 5 de las 8 fechas que van del torneo; completan 2 empates frente a Envigado y Huila y 3 derrotas con Equidad, América y Alianza Petrolera. Esto sumado a la caída internacional que sufrieron contra el discreto equipo argentino, Atlético Tucumán, que los eliminó en la serie que definía el paso a la zona de grupos. En su debut en Copa Águila lograron su primer triunfo 2 – 0 ante Real Cartagena, en el que el equipo presentó una nómina mixta.

Con estos antecedentes, y con una serie de rumores creados sobre la división del grupo, el conjunto ‘Tiburón’ llega a Manizales con la presión de sacar los 3 puntos que le den un respiro al técnico y jugadores, situación idéntica a la que vivieron los caldenses en su visita a Bucaramanga en la Fecha 6. Por ahora los directivos del club juniorista respaldaron la continuidad del técnico samario confiando en que el equipo se recupere:

“Nosotros no estamos considerando en estos momentos la salida del profesor Gamero. Como junta directiva lo que tenemos que hacer es apoyar a este grupo de jugadores para que puedan salir de esta situación” Declaró a los medios Antonio Char, presidente del club.

Para su visita al Palogrande, los visitantes tendrán lo mejor de su nómina, una de las más reforzadas del torneo y que este domingo, según el ‘Heraldo’ formaría con: Sebastián Viera en el arco, Lewis Ochoa,  Felipe Correa, Alexis Pérez y Germán Gutiérrez, quién reemplazaría al sancionado Héctor Quiñónez. La zona de volantes estaría compuesta por James Sánchez, Enrique Serje y Juan Camilo Roa en recuperación, acompañados por un peligroso tridente ofensivo al mando de Jarlan Barrera, Robinson Aponzá y el paraguayo Roberto Ovelar.

Las principales novedades en esta formación con respecto a la que enfrentó al Atlético Huila pasan por el fortalecimiento de la zona media con Juan Camilo Roa y el descarte de un delantero, que en esa ocasión fue Michael Rangel. Gamero cuenta además con variables importantes como Rafael Carrascal, Leonardo Pico y el argentino Bernardo Cuesta que llegaron como refuerzos para la Copa Libertadores, pero no han logrado consolidarse en el equipo. Jonathan Estrada y Rangel no fueron incluidos en la nómina viajera.