Con mucha ilusión se llegaba hoy al partido entre Alianza Petrolera y Once Caldas; por primera vez en 5 torneos, el Blanco tenía altas posibilidades de volver a jugar las finales de la Liga. Pero todo ese optimismo generado se vino abajo rápidamente al minuto 9 con el gol de Pablo Vranjicán, que prontamente bajaba la ilusión a los hinchas del Blanco que viajaron a Barrancabermeja. Pero lo peor estaría por venir, Alex Castro anotaba al minuto 18 el segundo, tras una gran jugada individual…una pesadilla se vivía en “Barranca”. El técnico decide ingresar a Ray Vanegas por el lesionado Miguel Nazarith, y fue precisamente el extremo el que le dio vida al Once Caldas. En el minuto 45, el jugador anota un lindo gol definiendo al palo derecho del arquero Jérez, aprovechando un rebote. Un minuto más tarde por poco anota el empate. Para el segundo tiempo, el equipo de Bodhert sale con todo en búsqueda de la igualdad, ingresa a Edder Farías, inexplicablemente apartado de la titular; pero sus falencias defensivas fueron desnudadas por los dos extremos petroleros. Castro y Balanta jugaron a su placer por las bandas del blanco, así llegaron los goles de Manuel Palacios y Diego Barreto para el impensado 4-1 en contra y una eliminación momentánea. El blanco no podía hacer nada en el campo de juego, su rival fue aplastantemente superior, y parecía más fácil el 5to que el segundo del Blanco; pero en Cali el América le dio vida, gol y empate que dejaba por fuera a la Equidad y metía de nuevo al Once Caldas a los 8 mejores. Así clasificaría el ‘Blanco-Blanco’, cayendo goleado en su peor presentación en el partido más importante, pero clasificando gracias a otros resultado. Meritoria clasificación, no por la derrota, sino por lo que hizo bien el equipo de Bodhert en todo el torneo.