Durante la presente semana, el Once Caldas viene desarrollando las llamadas Veedurías Nacionales 2017, convocatoria anual que tiene como fin observar jóvenes jugadores para ingresarlos a las categorías inferiores del club.
Las pruebas tienen lugar en el Polideportivo de Villamaría los días 16 y 17 a las 7:30 a.m. (Categoría 98-99), 18 y 19 (Categoría 2000-2001) a partir de las 7:30 a.m. y los mismos días las categorías 2002 – 2003 desde las 10:30 a.m.
Los jóvenes que se presentan deben hacer la respectiva inscripción, se dividen según la posición en el campo y luego conforman grupos para foguearse en cancha, donde deberán pasar por 3 filtros antes de llegar a las pruebas específicas que son el último escalón para hacer parte de las divisiones menores.
Los encargados de evaluar el proceso son los profesores de divisiones menores, César Hernández, Jaime Yepes, Paco Castro, Ancizar Valencia y Herney Duque, acompañados de los profesores de las escuelas, Oscar Upegui, Renzo Aristizabal , Luis Gabriel Valencia y la profesional en desarrollo familiar, Sonia Serna.
Casa blanca dialogó con algunos de ellos para conocer como se desarrolla este proceso.
Herney Duque, nuevo coordinador de las divisiones menores del Once Caldas.
“ Los jugadores están llegando de diferentes regiones del país, hasta el momento se han presentado unos 150 muchachos, se hace jugando en forma natural, posicionados a través de partidos, a partir de ahí se hace una selección de los que van a hacer sometidos a unas pruebas más específicas de carácter técnico – táctico.”, indicó
El profesor expresó además que buscan un relevo generacional, donde cerca de 22 jugadores ingresen a hacer parte del club, que de acuerdo a las necesidades posicionales puedan llegar a ser profesionales. Y agregó que en su nuevo cargo busca hacer muy funcional la estructura existente, para llegar a un fútbol más inteligente, de mejor toma de decisiones, que vaya ligado a los principios del plantel profesional del técnico Lisi.
César Hernández, profesor divisiones menores.
‘El Indio’ como es conocido en el ámbito futbolístico habló por su parte de la evolución del jugador caldense, aunque admite que aún son pocas las secciones y espacios de entrenamiento que tienen los clubes de la ciudad, ya que normalmente solo realizan 2 prácticas semanales y compiten 1 vez los fines de semana.
“Nosotros debemos empezar a mejorar desde el fútbol base, empezar a darle más unidades de entrenamiento a estos muchachos en la semana, cosa que permita que nuestro jugador evolucione de forma diferente, ya que es uno de los jugadores más ricos técnicamente del país”, argumentó.
También destacó que en las categorías 98-99 se deben potenciar en mínimo tiempo las habilidades de los jugadores para que logren ser profesionales, mientras con las demás categorías se puede hacer un proceso formativo más amplio, que genera posibilidades a futuro.
Ancizar Valencia, profesor divisiones menores.
“La idea es poder tener la posibilidad de observar talentos que tengan esas capacidades deportivas, técnicas, tácticas, físicas, que nos puedan servir para seguir conformando los grupos bases del equipo de divisiones menores en todas sus categorías”, aseguró.
Valencia, recordó como fueron sus inicios en el Once Caldas y en qué se diferencian los procesos de selección de aquella época.
“Era diferente porque a uno lo miraban en los torneos de liga y el técnico de turno, a mi me tocó con el ‘profe’ Petiso Núñez, que me vio jugar en Real Enea y después Cinemax, y ya le hacen a uno la invitación para poder ir al Once Caldas”. De igual forma, en la actualidad también se invitan a algunos jugadores mediante seguimiento a los torneos de liga.
En la foto aparecen de izquierda a derecha: Santiago Rodríguez de Armenia, Johan López de Manizales, Juan José Hipia de Cali, y Luis Fernando Marín de Pereira, quienes pasaron el primer filtro y ven estas veedurías como una gran oportunidad para ser profesionales.
