El jugador del Once Caldas que quizás más sintió toda la tragedia que vivió Manizales la semana anterior con los deslizamientos de tierra, fue John Fedy Salazar; el barrio que lo vio nacer (Aranjuez) pasó momentos dramáticos…

“Fue algo muy duro, pero a la vez bonito porque se vio mucha solidaridad de la gente; no quita nada de mi parte estar ayudando allá en el pueblo. Ser jugador profesional no me hace más que nadie, solo me metí y colaboré”, manifestó Fredy.

Aunque sus familiares no sufrieron afectaciones, algunos de los amigos del barrio padecieron la situación que se presentó. El atacante tuvo un gesto noble y con palas ayudó a remover tierra de las casas de sus conocidos.

Foto: Nicolás Orozco
Fredy Salazar recorriendo lo sectores afectados Foto: Nicolás Orozco

“Gracias a Dios mi familia no salió afectada, hubo varios amigos damnificados. Es algo que lo mueve a uno, es gente con la que uno crece, compañeros de toda la vida y el barrio que me vio nacer; me conmovió mucho todo lo vivido”, añadió

El jugador solo pide que la naturaleza sea más amable con los suyos: “Vamos mejorando con la esperanza de que no siga lloviendo. Empieza a caer agua y entra el pánico de todos, gracias a Dios han venido haciendo días bonitos y esperamos que siga así”, finalizó.

Los actos nobles reciben su premio y aunque no tiene nada que ver una cosa con otra, Fredy tras la salida de Hernán Lisi, ya tuvo de nuevo la oportunidad de regresar a formación inicialista después de muchos partidos; jugó ante Envigado y espera seguir teniendo continuidad